Reseña: El abogado más renombrado del país, dueño de uno de los estudios jurídicos más poderosos, fundado y dirigido durante décadas con mano de hierro, ha desaparecido sin más, del sanatorio donde era atendido por una dolencia cardíaca. Pide que no lo busquen, pero deja por detrás muchas cuestiones pendientes. Desaparece pero no se va de las vidas de sus allegados. Ha dejado sustitutos que actúen por él. Cecilia y Agustina, medias hermanas y sobrinas del ausente, de la noche a la mañana deberán lidiar con un estudio pródigo en cuestiones que desconocían, pese a trabajar allí durante años, y que las ponen en riesgo. Descubrirán, entonces, que el mundo perfecto en el que han vivido no lo es tanto y que, tras las apariencias, muchos son muy diferentes de lo que pretenden mostrar. Sobre todo, en aquellos ámbitos en los que el poder, el dinero y el derecho se dan la mano. Surgen extraños adversarios que en parte se muestran y en parte permanecen en las sombras, que conocen más que suficiente de todo y de todos, como para moverse entre ellos y saber descargar sus extraños golpes. En un punto medio entre la intimidad psicologista y la ironía con rasgos costumbristas, desde sus primeras páginas...