A partir de la pandemia de covid-19 se hizo evidente que salud y economía están entrelazadas. Pero la naturaleza de ese vínculo se presta a confusión. ¿Quiere decir que el campo de la salud es un mercado regido por el mecanismo neutral de la oferta y la demanda? ¿Que los precios de los medicamentos y tratamientos se corresponden virtuosamente con los costos de producción y no hay posiciones monopólicas en la industria farmacéutica? ¿Que simplemente hay que asegurar el uso óptimo de los recursos para atender las enfermedades, evaluar la eficiencia de los servicios sanitarios y mejorar su organización? Este libro, que reúne el aporte de autoras y autores con enorme experiencia en la investigación y gestión sanitaria, viene a discutir ese enfoque técnico-gerencial, que se desentiende de las desigualdades sociales y geográficas en el acceso a la salud. Y propone una discusión abierta y franca desde una perspectiva fuerte no meramente retórica de la salud como un derecho. Construye así una agenda de debate por fuera de las recetas automáticas. Con foco en el sistema sanitario argentino y brasileño, y atendiendo también a modelos de los países centrales, describe el caso argentino, donde conviven tres subsistemas heterogéneos entre sí y hacia el interior de cada uno: el público, el privado y el de la seguridad social. Se pregunta por el rol del Estado en cuanto a inversión, coordinación y creación de incentivos. Explica hasta qué punto el campo de la salud que involucra la industria química, biotecnológica, mecánica, y un gran potencial de innovación puede ser un motor de desarrollo productivo, generación de empleos y soberanía sanitaria. Y pone la lupa en consensos que conviene revisar: ¿cómo puede ser que solo en salud se dé la paradoja de que un mayor desarrollo tecnológico, en lugar de abaratar los servicios, los encarezca? ¿Cuánto incide en esto la concentración corporativa y la lógica financiera de los laboratorios? ¿Cuánto le deben las vacunas al impulso del sector privado y cuánto a la inversión pública? ¿Cómo garantizar un calendario de vacunación que se pueda financiar en el largo plazo? ¿Cómo articular una gobernanza global de la salud a contrapelo de la concentración de las patentes en pocas manos? Con mirada amplia, La salud sí tiene precio busca abrir un debate colectivo impostergable, para repensar el sistema de salud con el objetivo de que sea más igualitario, más accesible, capaz de responder a las necesidades de la población y de contribuir al desarrollo económico nacional.