Estos textos --escritos entre 1980 y la actualidad- pueden leerse como el desarrollo y el drama de la formación de un país. De Sarmiento y el origen de la cultura argentina a la consolidación de la profesión de escritor, del carácter cosmopolita y criollo de Borges a la poética inigualable de Saer, de Tizón a Fogwill, de Victoria Ocampo a Juana Bignozzi, de Sergio Chejfec a Alejandro López, Romina Paula y Washington Cucurto, la autora dibuja el mapa de la literatura escrita en la Argentina desde el siglo XIX hasta nuestro presente. En combate contra el conformismo y los lugares comunes de la crítica, su escritura encara figuras indiscutidas y escritores minoritarios, temas censurados y aspectos soslayados, desagravios y lealtades.